Como ya les conté estoy viviendo uno de esos procesos profundos para los que ningún idioma (creo yo) tiene las palabras precisas para explicar o definir... no me levanté un día y dije "hoy seré pura paz y amor", nooooo, surge como una vocecita interna que te pide avanzar en un camino desconodido o que no recordabas y a medida que vas descubriendo y avanzando te vas quebrando y rearmando... no es un camino de "pétalos de rosa", es como tratar de caminar en ese juego tan terrible de las atracciones mecánicas itinerantes (tipo "Fisa" o "Divertilandia"): ese llamado "Tagadá" jajajajaja... ya me lo habían advertido pero NO me arrepiento, hay capítulos raros como el de anoche pero... cuando lo cruzaste descubriste que lo que creías doloroso fue más bien liberador... ya les dije: NO soy misteriosa, es que no sé como explicarlo...
Lo de ayer fue extraño: Quizás siempre he evitado todo lo que provoque pena y dolor, no sé si me he vuelto muy fría y poco emocional o siempre fue así, tengo la sensación que siempre fue así (salvo una vez que mi mundo quedó patas arriba por varios años... eran los locos años 90s y bueno esa historia ya la debo haber contado)... sucede que anoche terminé de ver una serie coreana ambientada en la era Joseon, las situaciones que vivieron los protagonistas me hicieron por primera vez dejar de normalizar situaciones tan dolorosas y ponerme en la piel de todas mis ancestras... todas viudas (acá el caso era al revés) y fue así como sentí el dolor del personaje y desfilaron en mi mente todas esas ancestras con su dolor y comencé a llorar a sollozos, hace muchísimos años, muchísimos que no lloraba así... pude entender las situaciones que vivieron mis ancestras, su dolor, su valentía, su resiliencia, mientras mi corazón se aceleraba en una fuerte taquicardia pero extrañamente no tuve miedo, sentía que al llorar y entenderlas, ponerme en sus zapatos: las liberaba y me liberaba... es que no sé como explicarlo de una mejor forma... al terminar la serie y poco a poco mi llanto, quedé con una sensación de esperanza, si, si se que es extraño pero eso fue lo que sentí. Era como si yo, que vivo arrancando de lo que sea triste, debía ver esa historia, la que en cualquier momento pude parar y comenzar a ver otra cosa mas no pude, algo me decía que siguiera, tenía que verla para relacionarla con estas viejas historias familiares, cortar el dolor normalizado, empatizar y honrar a mis ancestras, cada vez con más amor, como si las estuviera abrazando con esta humanidad de un metro setetentitanos a todas ellas, ahora al recordarlo me emociono... creo que se van colando en mis lecturas, en las series que veo, en la cocina, en mi pequeña oficina, acompañandome, ordenanando mis rulos cuando caen sobre mi cara, tomandome de mis hombros, haciendome sentir su amor y su energía estas 8 mujeres hermosas de mi línea materna (ya podré hacerlo con las de mi línea paterna)... son las mismas que siento detrás de mí en mi cocina mientras lavo platos o cocino, a ratos ya creo que las escucharé diciendo "poquita sal..." o cosas así... gracias gracias gracias... a mi amiga la Sra Sylvia, a mi nueva amiga Angelina, a la Anita María que siempre ve más allá que yo en estas situaciones, a mis comadres que en vez de cuestionarme me contienen, a mis divas... no he podido contarles esto no de egoísta, es que, como escribí en un inicio: no encuentro las palabras...
Agradezco y honro a cada una de mis ancestras por su amor y su energía...
Y recuerden: comentarios, consultas, saludos... al email IQUIQUEBEACH@GMAIL.COM (pero todo en minúsculas) porque la casilla de comentarios simplemente NO funciona
